
Incluso ya hizo una apuesta con Mayra Domínguez, la flamante soberana de Maipú: como a ambas les gusta el fútbol, quedaron en hacer un campeonato de payanitas. ¿Sumarían así un nuevo capítulo a la Fiesta?
Además, y amén de prometer que se abocará a promocionar su departamento y al margen de repetir el acartonado latiguillo: “Voy a representar a mi pueblo como se lo merece”, su alteza aclara que “principalmente” está dispuesta a divertirse y disfrutar de las experiencias que vengan hasta la gran noche de la elección nacional.
“De otra forma, no tiene sentido”, asegura con la autoridad que le da el tener otra corona: también es la virreina provincial de los Estudiantes 2006. Ver nota completa en Diario Uno
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