
Así, a ningún ciudadano acostumbrado a manejarse con los cajeros automáticos le asombra tener que esperar hasta 20 o 30 minutos para retirar dinero, o recorrer una a una las entidades que ofrecen este servicio para encontrase con la advertencia más temida: “Disculpe, en este momento no podemos entregar efectivo”. Ver nota completa en diario Uno
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