Dejen de güeviarnos

“Creo que la mía es una de las pocas (declaraciones de bienes) que todavía están en internet. Yo no tengo vida privada, sino pública. Todos saben dónde y cómo vivo, adónde voy de vacaciones… El gobernador ya no vive con $3.000, porque hemos tenido aumento. Cobro $4.600; mi señora es ingeniera y trabaja, mis hijas también, dando clases. A mí me alcanza y sobra la plata para vivir una vida normal y digna”, disparó el gobernador de Mendoza Julio Cobos ante acusaciones de la interna iglesista del radicalismo provincial.

Ahora, lo mejor sería que muestren todos. A Cobos le creo, al menos es verdad que los viñateros, los católicos anti-aborto y los vecinos chuchis del Gran Mendoza lo fueron a apretar al frente de su casa familiar, sin que intervinieran policías ni patovicas. Al contrario, los escuchó a todos. Suena lógico que con bastante más de $5.000 pueda vivir cómodamente. Nadie lo denunció por algún negocio o crecimiento patrimonial inexplicable.

Si lo que están denunciando los iglesistas es el uso del aparato del Estado para proyectar al gobernador un poco más allá del insulso papel en el Congreso de la nación que el sistema político local le reserva a un mandatario exitoso, que no se hagan los boludos. Que digan de una vez y claramente cómo se usa. Todos lo saben, más fielmente o con distorsiones, todos lo saben. Pero que lo digan.

Cuando los radicales se peleaban por la sucesión de Roberto iglesias y los lugares de las listas sábanas que acompañarían al elegido, el devaluado José Genoud acusó a Armanado Camerucci, entonces funcionario de Gobierno y principal operador de Iglesias, hoy presidente del Comite Provincia de la UCR, de gastarse la plata de todos nosostros para ganarle la interna a su sector, Causa. Hoy Genoud está aliado a Iglesias, no aparece públicamente porque sigue embarrado como uno de los principales actores del escándalo de las coimas del Senado.

Es decir, dejen de güeviarnos. Por lo menos sorprendan con algo nuevo, si en estas elecciones también van a denunciar a los demás por hacer lo mismo que hicieron todos cuando gobernaron, se les va a aburrir la monada.