El mandatario puntano acusó al macrismo de usar métodos mafiosos para presionar a los gobernadores. Y cuestionó el destino de 150 mil millones de dólares de deuda
El gobernador de San Luis, Alberto Rodríguez Saá, desglosó una batería de críticas al gobierno nacional mientras argumentó su negativa a firmar el pacto fiscal que abrochó el presidente Mauricio Macri con el resto de los mandatarios provinciales del país.
El puntano enfatizó sobre la inconveniencia del pacto para su provincia al mismo tiempo que acusó al gobierno macrista de utilizar métodos mafiosos para obligar a los gobernadores a aceptar quitas en las acreencias que tienen con la nación y de administrar mal los fondos nacionales.
El escenario de las críticas del mandatario puntano a la administración de Macri fue el plenario de las comisiones de Trabajo y Previsión Social y de Presupuesto y Hacienda convocado para tratar las reformas impositivas, laboral y previsional que pretende imponer el macrismo.
Rodríguez Saá fue el único mandatario provincial que rechazó firmar el pacto impulsado por Macri luego de conocerse el resultado de las elecciones legislativas del 22 de octubre, que implica la reducción de los impuestos provinciales a los empresarios y la renuncia a los juicios contra la Nación por deudas relacionadas a la coparticipación de impuestos.
San Luis tiene un fallo a favor de la Corte Suprema en una demanda que entabló por la retención del 15% de su coparticipación para ser destinada a la caja del ANSES. En la misma situación está Santa Fe, pero su gobernador, el socialista Miguel Lifschitz, se allanó a los deseos de la Casa Rosada.
El mandatario puntano atribuyó su decisión de no firmar el pacto a la inconveniencia de los términos acordados para su provincia y a la defensa de la autonomía que tienen las provincias para dictar sus propios tributos.
Rodríguez Saá recriminó al gobierno de Macri la falta de diálogo para resolver temas pendientes entre la Nación y San Luis, como la deuda que legitimó el máximo tribunal de Justicia por la retención indebida de la coparticipación.
En otro tramo de su argumentación, el puntano recriminó al gobierno nacional por el destino de "los 150 mil millones de dólares de deuda" que contrajo en dos años al mismo tiempo que "tiene un déficit fiscal enorme". Y se preguntó: ¿Dónde está esa plata?".
Dijo que "San Luis está bien administrada" y que "la que está mal administrada es la Nación", en rechazo a la intervención nacional sobre las autonomías provinciales.
A renglón seguido cuestionó que Macri "salió corriendo a pagarles a los acreedores extranjeros y para pagarles a las provincias hay que buscarle la vuelta y hay que hacer consenso fiscal. No los firmo, no nos conviene, la provincia de San Luis no firma".
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